En total fueron 27.771 pasajes aéreos y terrestres que financió la Cámara baja en el primer semestre. El debate sobre si el Congreso debe financiar actividades políticas.

En el primer semestre de 2024 la Cámara de Diputados financió 27.771 pasajes de avión y terrestres, según la información oficial que publicó el organismo legislativo. Esto da un promedio de 108 billetes por diputado durante los primeros seis meses.

Según pudo verificar MDZ con fuentes de la Cámara de Diputados, cada pasaje aéreo costó en promedio $186.446,17. Si se tiene en cuenta que de los 27 mil totales, 15.042 fueron en avión, sólo en el primer semestre se destinaron $2.804.523.346,3.

En el entorno de Martín Menem, titular de la Cámara baja, le aclararon a este medio que la gestión del riojano "logró un ahorro anual de 12.336 pasajes que implicó $2.300.000.000 menos de gasto". 

“Profundizando el mandato de austeridad encomendado por el Presidente Javier Milei, la Cámara de Diputados de la Nación continúa auditando sus gastos y funciones”, señaló Menem en marzo cuando dio a conocer que la Cámara baja reducía la cantidad de pasajes por diputado y el uso de los salones VIP.

Los 27 mil pasajes emitidos por la Cámara baja no implica necesariamente que los hayan usado los diputados. Cada año, los jefes de despacho reciben un menú de cinco opciones para elegir cómo se conforma el componente de traslados en sus dietas.

Esto se divide en pasajes aéreos nominados (que son para el diputado y no pueden se transferidos), innominados (que pueden ser usados por cualquier persona, sea el diputado, trabajadores del despacho, o cualquier otro ciudadano) e innominados terrestres (que se usa comúnmente para pasajes de colectivos de larga distancia).

La opción uno incluye 10 nominados, 10 innominados, 16 innominados terrestres y nada de dinero. La dos, 10 nominados, 10 innominados, cero innominados terrestres y un monto de $173.412,57. La tercera,10 nominados, cero innominados, 16 innominados terrestres y un monto de $433.531,41. La cuarta, 10 aéreos nominados y cero innominados e innominados terrestres, con un monto de $606.943,98. La quinta opción no contempla pasaje de ningún tipo y un monto de $789.027,17.

Según sondeó MDZ en los distintos bloques, la gran mayoría de los diputados elige la primera de las opciones, la que incluye más cantidad de pasajes y nada de dinero. "Simplemente porque quedó desactualizado el monto y los pasajes a la larga los terminas usando", explicó un legislador, con un razonamiento que comparten desde los distintos bloques.

En el listado que publicó el área de Transparencia de la Cámara de Diputados llama la atención algunos viajes desde el aeroparque de la Ciudad de Buenos Aires con destino a Mar del Plata, en enero o febrero, plena temporada alta de La Feliz. Incluso muchos de ellos no son ni de la Capital Federal ni de la ciudad balnearia.

Muchos de estos diputados aseguraron a MDZ que no viajaron ellos mismos. El documento que se publicó no distingue quién viajó efectivamente, sí dice desde qué despacho se pidió el pasaje. "Esos pasajes son parte de la dieta que cobramos cada mes. Por tener esos pasajes nosotros recibimos menos dinero, entonces, lo que hacemos con eso es decisión nuestra. Porque es la remuneración que tenemos", explicó un diputado. "Después habría que dar la discusión de si está bien o mal que el Congreso pague de esa forma", consideró.

Desde el Frente de Izquierda, que aglutina a cinco diputados, tienen una postura unificada en este tema. "En nuestro caso los pasajes nominados se utilizan para viajes al interior, para estar presentes en luchas populares como huelgas docentes, dar charlas o participar de asambleas o plenarios con la militancia", explicaron ante la consulta de este medio.

"El resto de los pasajes, cuando se usan, los utilizan los compañeros asesores, legisladores de otras provincias para viajar a reuniones nacionales en Buenos Aires, dirigentes de organismos de derechos humanos para hacerse presentes en luchas o conflictos, otras organizaciones y referentes del interior para audiencias publicas y para coordinar la actividad con las bancas del interior, etc", agregaron.

Hasta 2018 funcionó un sistema distinto. Los diputados tenían una cantidad de pasajes por mes, que los legisladores apodaron "chequera". A fin de mes podían acercarse a una ventanilla y canjearlo por plata. Eso dejó de funcionar en la gestión de la Cámara baja de Emilio Monzó y se avanzó con este modelo de cinco opciones que no permiten un canje por dinero.