Ricardo Arriazu coincidió con la postura del Gobierno sobre dilatar la salida del cepo y subrayó que si se aplicaba la medida al inicio de la gestión se iba a producir una devaluación.

El economista Ricardo Arriazu aseguró este miércoles que, a diferencia de sus colegas que "creen que hay que devaluar", él considera inviable esa medida en este momento. "Si devaluamos explota todo por los aires, se acabó (el gobierno de Javier) Milei. Se acabó todo", advirtió durante un almuerzo celebrado por el Rotary Club Argentino, realizado en el Hotel Libertador, de la Ciudad de Buenos Aires.

Arriazu, uno de los analistas que escucha el presidente, coincidió con la postura del Gobierno en torno a que aún no puede liberarse el cepo, y propuso "trabajar todos los días en sacar una medida que vaya flexibilizando".

“Soy enemigo del cepo, pero para liberarlo se necesita un tipo de cambio estable”, argumentó y aseguró que si se hubiese liberado el cepo al principio del Gobierno, se iba a producir una hiperinflación. 

Asimismo, estimó que de acá a fin de año el Gobierno va a comprar US$ 6.000 millones de reservas, producto de las liquidaciones del sector exportar.

Por otro lado, el especialista indicó que a futuro Milei debe encarar reformas más urgentes como bajar la carga impositiva, bajar el gasto público; también apuntó a la carga financiera, quitar una por una las regulaciones y, para finalizar, mencionó la reforma laboral "que incluye una reforma jubilatoria".

Sin embargo, Arriazu admitió que el Poder Ejecutivo se equivocó en pensar que las Leliq eran un problema y aseguró que fue un error la velocidad de la baja de las tasas de interés en junio.