El fiscal Sergio Mola considera que su mansión de del Country Chacras de San Vicente, un departamento, diversos vehículos y viajes no condicen con sus ingresos.
El exjefe de Gabinete bonaerense y exintendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, dos de sus hijos y su exesposa siguen siendo investigados en la causa por presunto enriquecimiento ilícito y ahora el fiscal Sergio Mola pidió la indagatoria de todos ellos.
Mola considera que dos de sus hijos y su exesposa Carolina Álvarez son presuntos testaferros del exjefe comunal y colaboraron para ubicar "fondos provenientes de actos de corrupción vinculados al ejercicio de las distintas funciones públicas ejercidas por Martín Insaurralde evidenciados por situaciones de incompatibilidad, conflictos de interés y el incremento patrimonial apreciable que no encuentra correlato con sus ingresos lícitos".
Puntualmente, el fiscal duda de cómo Insaurralde pudo comprar la mansión del Country Charcas de San Vicente y del uso del departamento de Puerto Madero y varios vehículos.
El dictamen recuerda que el viaje a Mirabella de Insaurralde junto a Sofía Clerici costó U$S 55 mil y alquiló el yate "El Bandino" por una suma que supera los 13 mil euros. Mola enumeró los viajes al exterior del exfuncionario para fundamentar que ese estilo de vida no se corresponde con sus ingresos en blanco.
En ese sentido, la Justicia calculó durante la investigación que Insaurralde gastó U$S 98 mil en viajes, solamente en 2022 y 2023. El fiscal interpreta que esta cifra es "un monto inafrontable para una persona que desarrolló toda su vida económicamente activa en la función pública".
La mansión de San Vicente que también está en el ojo del fiscal fue comprada por la primera esposa de Insaurralde en 2006 por un valor de U$S 26 mil. Por ese entonces él era secretario de Gobierno de Lomas de Zamora.
Por su parte, el juez Ernesto Kreplak le dio la chance de que justifique su patrimonio, como antesala para avanzar con la indagatoria.
