El presunto líder de la organización y otras catorce personas fueron detenidas en dos operativos montados en el aeropuerto de Bariloche y Aeroparque.
“Ashram Shambala”, la supuesta secta rusa que fue descubierta este fin de semana en Argentina, actuaba de forma silenciosa, pero estaba muy bien organizada. Tenían roles y usaban como “pantalla” un falso grupo espiritual por el que cobraban 5 mil dólares por cursos de meditación. Detrás de eso existía -según sospecha la Justicia- una red de abuso, explotación sexual y control psicológico sobre mujeres.
Su presunto líder, un ciudadano ruso con un oscuro prontuario por violación, fue detenido este fin de semana en el Aeropuerto Internacional de Bariloche, cuando intentaba escapar a Brasil junto a otras ocho personas. También arrestaron a seis mujeres en Aeroparque, que serían parte de la misma organización.
El caso fue detectado a mediados de marzo, cuando el grupo entero se hospedó en una cabaña al oeste de Bariloche. Pero la pista clave que llevó a la Policía a sospechar de ese grupo fue el parto de una de las víctimas de la supuesta red criminal, quien fue a tener a su bebé en el Hospital Zonal Regional. La joven de 22 años estaba acompañada por otras chicas que no la dejaban hablar.
Según denunciaron los médicos que la atendieron, la joven madre estaba asustada y hasta les llegó a decir que “tenía miedo” por su integridad física. No hablaba perfecto español, pero se hizo entender. Después de parir, cuando ya estaba por ser dada de alta, le preguntaron datos de rutina y su lugar de residencia, pero ella no supo responder, al igual que con los datos del papá del bebé, que no asistió al parto.
Todas estas actitudes llamaron la atención de los médicos del hospital, quienes alertaron al 911 por protocolo. A partir de eso, se abrió una investigación en la Justicia Federal con sede en Bariloche, a cargo del fiscal general Fernando Arrigo, desde donde se ordenó operativo de vigilancia encubierta sobre la mujer embarazada y detuvieron preventivamente a las otras chicas que la acompañaban.
Este paso fue fundamental, porque se pudo realizar un seguimiento para establecer con quienes se vinculaban estas mujeres y por qué una de ellas tenía tanto miedo. La investigación fue un éxito, porque avanzó hacia la detención no solo de la estructura de la organización, sino además de su supuesto jefe.
Quién es Konstantin Rudnev, el líder de la supuesta secta rusa
El fiscal Arrigo ordenó la detención inmediata de Konstantin Rudnev, un hombre de origen ruso que está acusado de ser el jefe de la banda que operaba como una red de explotación sexual bajo una fachada espiritual. Simulaba ser el dueño de una empresa que brindaba cursos de meditación y yoga, por el cual cobraba 5.000 dólares a cada cliente. Lo que se intenta determinar ahora cuál era su objetivo final detrás de esa “pantalla”.
Nacido en Rusia, el exsoldado Rudnev fue condenado en 2011 en Europa, a 11 años de prisión en una causa por abuso sexual y desaparición de personas. Se sabe que actuaba en Montenegro, donde tenía su sede. Después de varios años en actividad delictiva, se mudó a Sudamérica desde donde continuó operando.
Rudnev fue arrestado nuevamente el viernes, en la zona de embarque del Aeropuerto Internacional Teniente Luis Candelaria de Bariloche, en la provincia de Río Negro, junto a otras ocho mujeres, las cuales estaban con signos de desnutrición, similares a los observados en las otras dos chicas que habían sido aprehendidas días antes por la Policía Federal.
Durante la detención, el único hombre del grupo intentó quitarse la vida cortándose el cuello con una hoja de afeitar que llevaba en su billetera, pero fue rápidamente reducido por los oficiales. Cuando le revisaron la valija, tenía cocaína.
Según fuentes judiciales, la mayoría de los detenidos son de nacionalidad rusa, otra mexicana y otra con doble ciudadanía (brasilera y rusa). Todos ellos habían comprado sus pasajes a través de la misma agencia de turismo y compartían el mismo trayecto: Bariloche – San Pablo, pero con una escala en Buenos Aires.
Fue así que descubrieron que había más personas involucradas, porque -tras un entrecruzamiento de datos- se detectaron otros ciudadanos rusos que habían viajado ese mismo día, horas antes, desde Bariloche. Entonces, la Justicia inició un nuevo operativo, pero esta vez en Aeroparque Jorge Newbery, donde arrestaron a otras seis mujeres, que también estaban en la zona de embarque, por partir hacia Brasil.
El fiscal general libró una orden de allanamiento de urgencia en un domicilio donde se había hospedado el grupo y encontró 131 pastillas de cocaína, dos camionetas, 12 celulares, un teléfono satelital, un handy, una antena de Starlink, tres notebooks con sus cargadores, 10 chips de teléfono, 14.931 dólares, más de un millón de pesos y otras divisas, además de pasaportes, tarjetas y documentación de interés.
Todos los detenidos quedaron incomunicados y a disposición de la Fiscalía Federal Descentralizada de San Carlos de Bariloche, a cargo del fiscal Fernando Arrigo, y del juez federal de Garantías de Bariloche, Gustavo Zapata. Ahora intentan determinar si entre las chicas había alguna víctima de explotación. Eso será determinado por la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX) en los próximos días.
En tanto, la mujer que dio a luz en el hospital de Bariloche fue rescatada y puesta bajo custodia policial junto a su bebé. Según las fuentes, está en un lugar seguro, acompañada por profesionales.