El robot de la NASA en ese planeta afronta fuertes pendientes que lo ponen a prueba, nada menos que en el cráter Jezero. Allí, el aparato buscará llegar a la cumbre, cuestión que será muy difícil.
El rover Perseverance de la NASA en Marte se encuentra en pleno ascenso por el borde occidental del cráter Jezero, con los terrenos más desafiantes que el rover haya encontrado hasta la fecha.
Este recorrido comenzó el 19 de agosto y se prolongará durante un mes para alcanzar la cima del cráter. En la imagen de arriba, tomada el 29 de agosto, se aprecian las rodadas que va dejando el vehículo ladera abajo. El ascenso marca el inicio de la nueva campaña científica de la misión, la quinta desde que el rover aterrizó en el cráter el 18 de febrero de 2021.
Según el estudio, llegar a la cima del cráter no será fácil. Para llegar allí, Perseverance dependerá de sus capacidades de navegación automática mientras sigue una ruta que los planificadores del rover diseñaron para minimizar los peligros y, al mismo tiempo, darle al equipo científico mucho que investigar.
El rover afronta pendientes de hasta 23 grados en el viaje (los conductores del rover evitan terrenos que inclinarían a Perseverance más de 30 grados), y habrá ganado unos 300 metros de elevación cuando llegue a la cima del borde del cráter en un lugar que el equipo científico ha denominado "Aurora Park".
Luego, encaramado a cientos de metros sobre el suelo de un cráter que se extiende a lo largo de 45 kilómetros de ancho, Perseverance puede comenzar la siguiente etapa de su aventura.
Dos de las regiones prioritarias que el equipo científico quiere estudiar en la parte superior del cráter se denominan "Pico Turquino" y "Witch Hazel Hill". Las imágenes de los orbitadores marcianos de la NASA indican que Pico Turquino contiene fracturas antiguas que pueden haber sido causadas por la actividad hidrotermal en el pasado distante.
Las vistas orbitales de Witch Hazel muestran materiales en capas que probablemente datan de una época en la que Marte tenía un clima muy diferente al actual. Esas vistas han revelado un lecho de roca de tonos claros similar al que se encontró en "Bright Angel", el área donde Perseverance descubrió y muestreó recientemente la roca "Cheyava Falls", que exhibe firmas químicas y estructuras que posiblemente podrían haber sido formadas por vida hace miles de millones de años, cuando el área contenía agua corriente.