El Xeneize no superó la fase inicial y deberá afrontar una importante sanción económica por acumulación de tarjetas. Caso similar al del Millonario.

El Mundial de Clubes 2025, que se disputó en Estados Unidos, dejó un saldo agridulce para los equipos argentinos River y Boca. A pesar de haber generado grandes expectativas en su regreso a una competencia internacional de peso, ambos clubes no lograron avanzar más allá de la fase de grupos, con lo cual su desempeño en el torneo dejó mucho que desear, tanto en lo deportivo como en lo económico.

El Xeneize no consiguió superar la fase de grupos y terminó en la 24ª posición en la clasificación general, según la publicación oficial de la FIFA al término del torneo. En su grupo, Boca cosechó dos empates, frente a Benfica y Auckland City, lo cual le permitió sumar apenas 2 puntos. Esta actuación no alcanzó para pasar a la siguiente ronda y relegó al Xeneize a los últimos puestos de la tabla.

En el extremo opuesto de la clasificación, Chelsea se consagró campeón tras vencer en la final al PSG, con 18 puntos, seguido por el conjunto parisino con 15 unidades y el Real Madrid, que acumuló 13. El mejor equipo sudamericano fue Fluminense, que cerró en la cuarta posición con 11 puntos.

Por si esto fuera poco, Boca recibió una sanción económica significativa debido a su comportamiento disciplinario. El club acumuló 5 tarjetas amarillas y 2 expulsiones, lo que derivó en una multa total de 112.500 dólares. Cada tarjeta amarilla fue penalizada con 12.500 dólares, mientras que las tarjetas rojas significan una multa de 25.000 dólares cada una.

En términos de ingresos, Boca recibió un total de 17,21 millones de dólares por su participación en el torneo. De ese monto, 15,21 millones correspondieron al premio por integrar la fase de grupos, mientras que los 2 millones restantes fueron obtenidos gracias a los empates conseguidos. Si el Xeneize hubiera superado la fase de grupos y alcanzado los octavos de final, habría recibido un bono adicional de 7,5 millones de dólares, lo cual no pudo lograr debido a su pronta eliminación.

River, dirigido por Marcelo Gallardo, también quedó eliminado en la fase de grupos, aunque con un desempeño ligeramente superior al de Boca. El Millonario sumó 4 puntos en el Grupo E, producto de una victoria ante el Urawa Red Diamonds y un empate frente a Monterrey. A pesar de su eliminación temprana, el equipo terminó mejor posicionado que Boca en la tabla general, ocupando el 18° lugar.

Sin embargo, el cuadro de Gallardo tuvo que enfrentar una fuerte sanción económica por acumulación de tarjetas. El club de Núñez fue el equipo con la multa más alta en la fase de grupos, que superó los 200.000 dólares. En total, River acumuló 11 tarjetas amarillas, que se tradujeron en 137.500 dólares, y 3 tarjetas rojas, que representaron una multa de 62.540 dólares. A pesar de estos contratiempos, los ingresos por su participación en el torneo fueron de 18,5 millones de dólares, una cifra considerable, pero también menos significativa debido a la eliminación temprana.

Tanto River como Boca no lograron cumplir con las expectativas puestas en ellos, y aunque ambos clubes tuvieron ingresos importantes por su participación, las sanciones económicas por las infracciones cometidas sumaron un saldo negativo. Ambos equipos deberán trabajar en mejorar su disciplina y rendimiento si desean tener una mejor actuación en futuras ediciones de la competencia.