Tras el rebote de la inflación en junio, especialistas pronostican que en julio el comportamiento de precios volverá a cierto nivel de estabilidad. Sin embargo, hay desconfianza sobre cuánto durará.

Contener la inflación es uno de los principales objetivos del gobierno de Javier Milei. Por ello, para asegurar el sendero a la baja, fueron poniendo en stand by diferentes aumentos -de tarifas de luz y gas, impuestos a los combustibles, transporte público, etc-. Con esta estrategia, se espera que cuando se conozca el Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente a julio, se logre romper con el piso del 4% o se este muy cerca de ello.

En este sentido, el rubro que más habría empujado el nivel de precios fue el de "Alimentos y Bebidas". Es decir, se volvió a dar la regla de que son estos bienes los que mayor incidencia tienen en la cifra final de inflación. Algo que no ocurría hace mucho, dado que regulados habían tomado más peso en la era Milei.

Ahora bien, esto no da tranquilidad. El hecho de que se manejen como un rompecabezas los aumentos que se autorizan -y los que no- genera incertidumbre respecto de cómo podrían impactar factores exógenos como una eventual corrida cambiaria o quita al cepo.

Inflación de alimentos

En este marco, la consultora LCG dio a conocer un informe sobre la tendencia de aumentos en alimentos y bebidas durante la cuarta semana de julio. En el reporte se detalla que hubo una mínima suba de precios del 0,2% en los últimos siete días. Lo que implica una desaceleración de 0,4 puntos porcentuales respecto de la semana anterior.

Continúa la disparidad entre rubros. Carnes, Lácteos, Panificados y Bebidas, que representan un 73% del índice continúan por encima la inflación semanal promedio, sumando 0,5 puntos porcentuales.

Tanto la proporción de productos con aumentos como con caídas aumentaron un punto porcentual en el promedio de las últimas 4 semanas, alcanzando el 24% y 21% de la canasta relevada, respectivamente. Y la distribución de variaciones de precios presentó baja dispersión, en línea con la semana previa.

De esta manera, la suba promedio mensual se sostiene en 3,9%, mientras que se reduce a 3,1% en la medición punta a punta de las últimas 4 semanas. Carnes, Panificados y Lácteos explican el 64% de la inflación mensual de alimentos.

Por su parte, la inflación en 'Alimentos y Bebidas' estimada por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) para la cuarta semana de julio fue de 1,1% respecto de los siete días previos. Este guarismo, al igual que las tres semanas anteriores (1,7%; 1,9% y 1,6%), indica que la dinámica de precios de julio se aceleró con respecto al mes de junio.

"Como se ve en el gráfico, la preocupación del Gobierno sobre la brecha estaba relacionada con el impacto sobre precios de la aceleración del CCL", expresó el economista y director de CEPA, Hernán Letcher.

Pronóstico inflacionario de julio

Si bien aún restan cuatro días para que termine julio y, por ende, se den a conocer los primeros informes de consultoras, ya se empezaron a adelantar algunas tendencias.

Florencia Iragui, economista de LCG, analizó que "se proyecta que la inflación de julio esté en torno al 3,5% en el general". Y en este sentido, puntualizó que "Alimentos está estancado hace 3 semanas en el 3,9% mensual, y si le adicionamos las 3 semanas anteriores, está alrededor del 4%".

Desde C&T, indicaron en diálogo con MDZ que "la inflación va a ser parecida a junio", y apuntaron que eso responde a que "Alimentos y Bebidas se movieron más rápido en las dos primeras semanas, y el efecto de las vacaciones en el turismo". Sin embargo, descartaron que se perfore el piso del 4%. Esperan que eso ocurra en agosto.

Por su parte, Letcher proyectó un 4,3%. "Este mes (en referencia a julio), no tuviste el impacto de servicios por la decisión del Gobierno. Así que, tarifas de luz y gas van a funcionar como ancla. La diferencia respecto de junio estuvo en Alimentos y Bebidas, que te va a tirar un poquito para arriba y te va a afectar más que lo que te había afectado el mes anterior", indicó el economista a este medio.

Y cerró: "Mirando hacia delante hay tres drivers para mirar. El primero es si sacan el Impuesto PAIS en septiembre, eso puede tener impacto a la baja. Entonces, la inflación mayorista te puede dar debajo de dos. Eso efectivamente pasará, siempre y cuando no tengas el segundo driver, que es que se mantenga el tipo de cambio al 2%. En cuanto al tercer driver es que solo se logrará que el IPC mayorista sea del 2%, si no se actualizan los servicios".