La reciente inspección en los depósitos del Ministerio de Capital Humano ha mostrado significativas discrepancias entre los registros oficiales y lo que había almacenado.
La reciente inspección en los depósitos del Ministerio de Capital Humano ha mostrado significativas discrepancias entre los registros oficiales y la realidad.
Durante un procedimiento ordenado por el juez federal Sebastián Casanello y ejecutado el pasado sábado, se evidenciaron diferencias alarmantes en las cantidades y condiciones de los alimentos almacenados.
El ministerio, liderado por Sandra Pettovello, enfrenta serias acusaciones tras este hallazgo. Según trascendió, existen múltiples divergencias en los inventarios, incluyendo la falta de alimentos esenciales y otros cuya fecha de caducidad había expirado y ya no se encontraban en el lugar.
Durante una tensa audiencia en la Cámara Federal, el dirigente social Juan Grabois destacó la gravedad de la situación al revelar que "hay faltantes en los depósitos", señalando una posible negligencia o mal manejo en la administración de los alimentos. La fiscal Paloma Ochoa, que solicitó la inspección, también está al tanto de estas irregularidades mientras avanza la investigación.
Según un informe detallado de la División de Investigación contra la Corrupción de la Policía Federal, se reportaron discrepancias significativas en las cantidades de alimentos, como la leche en polvo, donde los números no coincidían con lo declarado por el Gobierno.
El escenario es aún más complicado con la proximidad de la fecha de vencimiento de varios productos, lo que aumenta la presión sobre el ministerio para distribuir estos alimentos de manera efectiva antes de que ya no sean aptos para el consumo. Con la investigación en curso, todos los ojos están puestos en las próximas acciones del Gobierno para rectificar estas fallas en los próximos días. Lo cierto es que esta mañana se aceleró la entrega de alimentos por parte del Ejército para apaciguar las críticas de la oposición.