Es que, tras el rechazo de la justicia al pedido de sobreseimiento de parte de la defensa de los imputados por condiciones mentales, se determinó elevar la causa a debate oral por jurado. –eldiariodecatamarca.com
En el marco de la investigación por el crimen de Miguel Ángel Ferreyra, ocurrido en el barrio 140 viviendas de El Bañado, en el departamento Valle Viejo, el juez Lucas Vaccaroni rechazó este viernes los pedidos de sobreseimiento de Jorge Castro y Mónica Múrua, imputados por homicidio, siendo elevado el expediente a la Oficina de Juicio por Jurado, donde se dará inició al trámite correspondiente para el desarrollo del debate oral.
La defensa de Castro había solicitado la inimputabilidad de su defendido aduciendo que este padece de un retraso madurativo moderado, argumento que fue rechazado. Se espera que en los próximos días se establezca fecha del debate, el que será en modalidad por jurados lo que implica que el veredicto de culpabilidad o inocencia de los imputados quede en manos de un grupo de ciudadanos.
Cabe recordar que, en la audiencia pasada, el abogado Jorge Bracamonte (h), defensor de los acusados basándose en las pericias obtenidas de diferentes profesionales, expuso su pedido de sobreseimiento ante el juez, el cual fue rechazó debido a que para la justicia ambos imputados entendieron la criminalidad de los hechos y la magnitud de su accionar.
HECHOS:
El crimen ocurrió el 10 de septiembre del 2023, en el Bañado, departamento Valle Viejo, según la causa la víctima Miguel Ferreyra se encontraba con varios amigos cerca del “canal de la muerte”, en el barrio 140 viviendas. Momentos después apareció Castro y comenzó a discutir con la víctima debido a conflictos previos. Luego de un rato, el acusado se retiró del lugar y regreso más tarde acompañado de su madre, Murua, esta última traía en una de sus manos un látigo, mientras que Castro tenía un cuchillo y una pala.
Comenzaron a discutir y una persona se interpuso tratando de detener y calmar la situación, sin embargo, cuando Fereyra se alejaba ambos acusados lo alcanzaron y fue en ese momento que comenzaron a golpearlo con la pala y el látigo.
Finalmente, una vez que la víctima estaba tirado en el piso sin poder defenderse, Castro le habría asestado una puñalada mortal.
