El próximo 6 de mayo se realizará la audiencia de admisión de pruebas en la causa por la muerte de Liliana Garabedián, cuyo esposo está imputado por abandono de persona seguido de muerte. El juicio por jurado popular comenzará el 4 de junio, tras años de demoras y una investigación atravesada por planteos procesales. –eldiariodecatamarca.com

La causa por la muerte de Liliana Garabedián avanza hacia su etapa final. El próximo martes 6 de mayo se realizará la audiencia de admisión de evidencia, instancia previa al juicio por jurado popular que comenzará el 4 de junio. Ambos procedimientos se llevarán a cabo en la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA) del Poder Judicial.

La investigación fue llevada adelante por la fiscal de Instrucción N.º 1, Yésica Miranda, quien elevó la causa a juicio. En esta nueva etapa, Miranda actuará junto al fiscal de Cámara de la Cámara Penal Nº 3, Miguel Mauvecín. El debate será dirigido por la jueza Patricia Olmi.

Roberto Barros, esposo de la víctima, llega al juicio imputado por el presunto delito de “abandono de persona seguido de muerte, agravado por el vínculo”. Será defendido por el abogado particular Herman Zalazar. La querella, en representación de la familia de la víctima, está a cargo del abogado Iván Sarquís.

La audiencia de admisión de prueba había sido suspendida en febrero pasado, a raíz de distintos planteos procesales. Por un lado, la Fiscalía solicitó la realización de una pericia psiquiátrica al imputado para determinar si comprendía la criminalidad del hecho que se le atribuye. Al mismo tiempo, restaba resolver la acción civil impulsada por la madre de la víctima, Leonilda Carrizo, quien finalmente desistió de esa vía.

Tras completarse la pericia psiquiátrica por parte del Cuerpo Interdisciplinario Forense (CIF) y cumplirse con las medidas pendientes, el tribunal fijó las nuevas fechas para la audiencia y el juicio.

La causa se originó en diciembre de 2010, cuando el cuerpo sin vida de Liliana Garabedián fue hallado en un descampado cercano a la localidad de Nueva Coneta, en el departamento Capayán. El hallazgo se produjo luego de que su familia denunciara su desaparición. Desde entonces, la investigación atravesó distintas etapas judiciales hasta que, el año pasado, fue finalmente elevada a juicio.