Tenía 31 años. Cayó desde el tercer piso de un hotel en el barrio de Palermo, en la ciudad de Buenos Aires. El caso se investiga como “suicidio”
El cantante y ex One Direction, Liam Payne, que murió este miércoles al caer del tercer piso del hotel en que se alojaba en Buenos Aires, protagonizó un raid de descontrol en sus horas finales.
Clarín accedió a fotografías de cómo quedó su habitación en Casa Sur, de Palermo, el lugar donde la estrella del pop mundial encontró un fatídico final.
El británico, que tenía 31 años y había llegado a la Ciudad de Buenos Aires en parte como turista y en otra parte, para hacer una aparición en el show que dio su ex compañero de banda Niall Horan el 2 de octubre en el Movistar Arena.
Se alojó en la Deluxe Suite del exclusivo hotel palermitano, donde encontraron una escena dantesca. Un televisor con su pantalla estallada por algo que impactó sobre ella es una de las imágenes que trascendieron.
Otra fotografía muestra el escritorio de la habitación: allí hay un envase de un jabón Dove, fósforos, restos de vela, papel aluminio y un polvo esparcido que se presume cocaína.
También hay un encendedor y la parte superior de una lata de gaseosa con el metal quemado.
Más restos de vela y papel aluminio se encontraron en la bañera de la suite que ocupaba Payne, cuyo fondo estaba manchado y con algunas quemaduras.
Payne fue hallado muerto por policías y médicos del SAME en el patio interno del hotel Casa Sur, al caer del tercer piso. Hubo un llamado al 911 que alertó por la presencia de "un hombre agresivo que podría estar bajo efectos de drogas o alcohol".
En uno de su últimos posteos en Snapchat, el cantante escribió "Hermoso día en Argentina", mostró su desayuno y anunció que iría a jugar un partido de polo.