Las lluvias recientes generaron condiciones ideales para que proliferen en AMBA y agiten de nuevo el riesgo del temido virus.
Las copiosas lluvias que cayeron días pasados en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), en jornadas de mucho calor y humedad, dejaron charcos y recipientes con agua que oficiaron de criadero y desarrollo de los huevos y larvas de mosquitos.
Aunque ya estén algo pasados de la temporada, se hacen sentir en el contexto de las tormentas que se ciernen sobre la región central, en cuyos conglomerados prolifera el mosquito vector del dengue y hay mayor circulación del virus.
La reproducción del mosquito no solo complica el control del Aedes Aegypti, transmisor del dengue, Zika y Chikungunya, que se ve favorecido por la situación, sino también de otras especies de mosquitos.
Los profesionales aseguran que los mosquitos aprovechan estos últimos periodos de humedad y de temperaturas adecuadas para colocar la mayor cantidad de huevos posibles.
La humedad no mata
El ambiente húmedo es ideal para la supervivencia y reproducción de los mosquitos.
Es por ello que el Ministerio de Salud aconseja a la población eliminar los criaderos, vaciar recipientes con agua (baldes, macetas, neumáticos, bebederos de mascotas), tapar tanques de agua y desagües, mantener patios y jardines desmalezados, usar repelentes y protección personal, desparramar aplicaciones en la piel y renovar cada pocas horas.
Recomienda también el uso de ropa clara, de manga larga y pantalón largo al amanecer y atardecer.
En el hogar, es imprescindible que haya mosquiteros en ventanas y puertas, usar espirales, tabletas o difusores eléctricos, encender ventiladores y aire acondicionado para dificultar su vuelo.
En zonas con gran cantidad de mosquitos, las autoridades pueden realizar fumigaciones.
En cuerpos de agua, algunas especies de peces pueden ayudar a controlar las larvas.
Prevención
La prevención es clave para evitar la propagación del mosquito, especialmente del Aedes aegypti, transmisor de enfermedades como el dengue.
Los mosquitos existen desde hace al menos 46 millones de años. Se cuentan más de 3,000 especies en el mundo.
Además de ser una molestia, también pueden ser transmisores de enfermedades y dejan picaduras que producen comezón.
Solo las hembras tienen las partes del pico necesarias para picar la piel y succionar sangre.
La necesitan para producir y nutrir sus huevos.
Por las precipitaciones seguidas, hay invasión de mosquitos en Ciudad y Gran Buenos Aires.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anunció, por su parte, que en esta semana lloverá solo durante esta madrugada, mientras otros pronosticadores indican que habrá tormentas varios días seguidos a partir del miércoles 26 de marzo.