Bajo el lema “San Cayetano, enséñanos a orar para que nuestras súplicas sean escuchadas”, este miércoles finalizó la novena en honor al Patrono del Pan y trabajo, que inició el pasado sábado 27 de julio. –Diario de Catamarca
En Argentina el día de San Cayetano, se celebra cada 7 de Agosto, en honor a este Santo Patrono del Pan y del Trabajo. La celebración patronal se caracteriza por un gran fervor popular, miles de fieles se congregan en las iglesias y santuarios dedicados al santo, para rezar, agradecer y pedir por sus necesidades, con oraciones, procesiones y ferias populares.
El pasada sábado 27 de julio, inició las fiestas patronales en honor a Cayetano, con una bicicleteada denominada “Cayetanito”, un homenaje de los niños de la Catequesis del barrio La Antena, de la parroquia Nuestra Señora de la Merced, con sede en Villa Dolores, departamento Valle Viejo.
Las celebraciones culminarán este miércoles, con la procesión a realizarse a las 17:00hs, bajo el lema de “La oración es la oportunidad para dejarnos transformar por Dios”, que saldrá desde la parroquia Nuestra Señora de La Merced. Luego iniciará la Santa Misa, pidiendo por el pan y el trabajo de cada creyente.
La fecha de la fiesta patronal de San Cayetano, se debe a que se conmemora su fallecimiento un 7 de agosto d 1547, a sus 66 años, luego de padecer una enfermedad. El 8 de octubre de 1629, fue beatificado por el Papa Urbano VIII y canonizado el 12 de abril de 1671 por el Papa Clemente X.
Cayetano de Thiene, fue presbítero, nació el 1 de octubre de 1480, en Vicenza una ciudad al noroeste de Italia. Comenzó sus estudios formales en Derecho en la Universidad de Padua, y a sus 26 años se mudó a Roma para comenzar su carrear en la religión. Ocupó el cargo de secretario privado del Papa Julio II. Tras el fallecimiento del sumo pontífice, decidió convertirse en sacerdote y fue instruido como tal en 1516.
Una de sus principales premisas era la de renunciar a sus bienes individuales, donde a pesar de ser parte de una familia bien posicionada económicamente, donó todo su dinero a causa benéficas. Es recordado por sus esfuerzos por asistir a las personas pobres y a los enfermos en todos los viajes que emprendía y ciertas asociaciones que creaba con tal fin, como Montes de Piedad. Durante la Reforma Protestante, revolución que se oponía a la Iglesia Católica, declaró “Lo primero que hay que hacer para reformar a la iglesia es reformarse uno a sí mismo”.
En la Argentina, el Santuario de San Cayetano se encuentra, ubicado en la calle Cuzco al 150, en el barrio de Liniers, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
